Para resolver los problemas que acechan al mundo actual, que se basan en las desigualdades, los fundamentalismos, la pobreza, la supremacía del poder económico y otras cuestiones que nos hacen vivir una realidad compleja e incierta, habría que encontrar un grupo de líderes que tuvieran como características principales temperamentos, actitudes, disposiciones, temples, caracteres y decisiones conciliadoras que, de una vez por todas y realmente, tienda puentes entre las posiciones encontradas, desde la fe, el convencimiento seguro y la aplicación de la razón junto al sentido común y la lógica, para empezar a modificar el caos que nosotros mismos hemos creado a lo largo de tantas décadas a esta parte. Dadas las actuales circunstancias, mi pensamiento es una quimera, o, por lo menos, pareciera serlo, pero en algún momento determinado, vamos a tener que buscar, encontrar y votar a personas que quieran hacer el bien, de manera sincera y rotunda, que tengan intenciones verdaderas de cambiar la tristísima existencia que transitamos. Es evidente que la política es el medio inefable para poder lograrlo, también es cierto que la Democracia es la única opción viable para poder hacerlo en libertad y con pluralismo, y que, a pesar de la existencia de mucha gente empeñada en apoyar y aplicar ideas compulsivas, cooptadas por la confrontación y el odio, somos muchísimos, también, los que queremos el bien común, que abarque a la mayor cantidad de personas y mejore la vida de los que están inmersos en un supuesto callejón sin salida. Mientras escribo mi ilusión de lograr una conciliación racional, convencido de lo que digo, en contrapartida, interiormente, también intuyo que es muy difícil llevarlo a cabo porque, insisto, hay un segmento de la ciudadanía a la cual no le interesa conciliar, ni limar asperezas ancestrales que contienen mucho de resentimiento, desprecio y antipatía extrema. Es, mayormente, el sector clasista de la población y otra fracción media, que aspira a ser lo que nunca será. A pesar de todo, deseo, fervientemente y con total sinceridad, que en un futuro se pueda revertir esta triste y cruel realidad que nos toca transitar. Nunca hay que perder la fe y la confianza en los ideales propios.
MOTIVO
Espacio dedicado a toda clase de comentario libre y espontáneo, despojado de intereses de cualquier tipo (y mujer)
martes, 21 de noviembre de 2023
sábado, 18 de noviembre de 2023
PROPIO VERDUGO
Votar al propio verdugo es inexplicable, indescifrable e incomprensible, únicamente se le encuentra una posible interpretación por el lado del desprecio hacia el que no piensa como ellos. No entiendo cómo la grieta en Argentina no es más profunda aún, porque un enorme segmento de ciudadanos, acompañados por un séquito de periodistas mercenarios que la alimentan desde hace años, solo en beneficio propio, provoca que un sector de gente, los reverencie, exculpe, justifique y vote. Creo que la grieta no se agrieta más porque los que no compartimos esos pensamientos cargados de rencor, intentamos amortizar esa antipatía, repulsión y menosprecio que emanan, con bastante temple, serenidad y moderación; de lo contrario, sería casi imposible cohabitar. No se alcanza a asimilar con sensatez tanta malevolencia y ensañamiento contra los que no comparten sus ideas y supuestos métodos “autócratas”. No comprendo al odio, nunca lo he transitado, no es un sentimiento que haya experimentado, ni siquiera una vez. Me puede caer mal una persona, no tener afinidad, no percibir buena vibra, no querer vincularme por percepción, intuición o corazonada, pero nunca he odiado a nadie; quizás por eso no los entiendo cuando se muestran con tanta furia y aborrecimiento. Sería mucho más productivo para el país que se dedicaran a tratar de aportar, en vez de compulsar y se decidieran a buscar formas y métodos para lograr apaciguar y progresar, en lugar de agitar y empeorar. A esta altura de las circunstancias, no sé si se logrará o querrán hacerlo realmente, (por lo que demuestran, lo dudo mucho), pero, a pesar de todo, insisto, no pierdo las esperanzas de vivir en un país donde todas y todos intentemos mejorar por y para el bien común. Para lograrlo, deberían cambiar varias cosas… entre ellas, el sistema corrupto que nos tiene atrapados hace décadas y los que participan de él, generándolo y ejecutándolo. Los llamados ‘verdugos’ son los que llevan la ventaja de saber que ciertos seres humanos tropiezan varias veces, no solo con la misma piedra, sino también con sus mismos azotadores. Confío en que esta vez, la gran mayoría de los argentinos y argentinas, vote pensando en favor de la Democracia y no en su antipatía hacia el contrincante. Por el bien de todos en general, por el bien de Argentina.
viernes, 17 de noviembre de 2023
"NOSOTROS" Y "ELLOS"... "ELLOS" Y "NOSOTROS"
Considero, reflexiono, encauso, expreso, transmito y concluyo… Así es, más o menos, el mecanismo que se atraviesa cuando uno comparte un pensamiento, una idea o un sentimiento de manera pública en estos espacios cibernéticos que, en cierta forma, hoy, nos regulan el día a día. La deducción y, también, la conclusión es que no siempre se recibe lo que se espera y muchas veces, una teoría que incluye solidaridad, inclusión, buenos sentimientos, sana intención y prósperos deseos para todos y todas, no obtiene la respuesta deseada o, por lo menos, esperada. Evidentemente, en muchas partes del mundo, no solo en Argentina, existe un gran porcentaje de personas que eligen emparentarse con el rencor, la agresión, el descrédito, la aversión, el desprecio y la repulsión ante el que no piensa como ellos. Si todos nos pusiéramos en ese plan, terminaríamos muy mal, porque no hay nada peor que enfrentarse al otro sin escuchar sus planteos y proposiciones. Indudablemente, a ese grupo al que hago referencia, no le importa otra cosa que ofender, denostar y desestimar, así que ni vale la pena intentar un acercamiento. No sé si será cierto, pero existe una creencia popular que determina al que actúa de una forma, la vida le devuelve de la misma manera. Haciendo hincapié en esa idea, se podría pensar, entonces, que la mala energía que generan en los otros, en algún momento, les volverá y si eso sucede, ojalá se den cuenta que la vida pasa por el discernimiento, la armonía, el entendimiento y la razón. Pero, a esta altura de los acontecimientos y por las actitudes demostradas por parte de ese segmento que va a votar personas que, incluso, avalan la dictadura, el terrorismo de Estado, los torturadores, apropiadores de bebes, violadores y asesinos que tiraban seres humanos vivos desde los aviones, creo que es muy ingenuo pensar en eso; Dolorosamente, sus votos van a ser cómplices de ese horror que vivimos hace más de cuarenta años atrás y hoy, inexplicablemente, vuelven a reivindicar. No alcanzo a entenderlo y menos a aceptarlo. Lo lamento por ellos y también por nosotros, porque ‘ellos’ y ‘nosotros’ o ‘nosotros’ y ‘ellos’, sin distinción de clases, géneros, ni posicionamientos, en definitiva, conformamos el país... nuestro hermoso país.
miércoles, 15 de noviembre de 2023
LA DEMOCRACIA NO SE PUEDE, NI DEBE, PONER EN RIESGO
A pesar de los desaciertos, las fallas, las culpas, los tropiezos, los errores, la inflación generada por acuerdos inviables heredados, las equivocaciones en las negociaciones con el FMI, la especulación comercial de los que siempre sacan partido y un cúmulo más de complicaciones, existe un desarrollo de país, un esquema estructural con criterio democrático. La diferencia con los que están enfrente reside en que, a pesar de todas las contradicciones expuestas, el denominador común sigue siendo tratar de ayudar a la gente en pos de una vida más justa, equitativa, solidaria y más libre, aunque, por momentos, se confunda la bronca y la impotencia que produce la realidad económica y social. Votar a sujetos que proponen violencia, ensañamiento, atropello y despotismo no es el camino y mucho menos, la solución. Los que elijan un modelo totalmente delirante, violento, e incongruente con el sistema, serán coautores de un escenario, factiblemente caótico, que, vaya a saber uno, en que desembocará socialmente. ¿Realmente piensan que pueden mejorar el país haciendo explotar las instituciones, pasando la motosierra a quien no piensa como ellos, reivindicando asesinos de la dictadura, instalando antinomias miserables hablando y actuando en favor de genocidas, anulando la educación pública, cobrando el estudio en las universidades que hoy son gratuitas, dejando a merced de cada uno la compra de armas, la venta de órganos, liberando los precios para que estalle todo? ¿Sinceramente, van a votar todo eso por convicción, en su propia contra, en desmedro de sus hijos? Quizás, con esta publicación, tendré rechazos, desaires, menosprecios y repulsas por el solo hecho de ejercer mi libre pensamiento, pero la única forma que entiendo una convivencia civilizada, es expresando las ideas con respeto y democráticamente. Trataré de seguir por el camino del optimismo, la fe y la confianza en aquellos que pretenden un futuro más próspero, equitativo, justo, solidario y más democrático, más allá de las discordancias. Si hay algo que hay que tener en claro es que la Democracia no se puede, ni debe, poner en riesgo bajo ningún concepto, aunque muchos quieran fomentar y materializar lo contrario.
martes, 14 de noviembre de 2023
PREOCUPANTE... ALARMANTE
Existen tipejos con ciertas patologías que muchos aplauden, vitorean y/o exaltan sin reflexionar un solo instante en el daño que personajes con características similares han provocado (y siguen generando desde las sombras) en el país. El daño, además de inmoral, es económico y nos incluye a todas y todos los que habitamos Argentina. Más allá de las antipatías políticas, los rechazos de clase y los odios acérrimos que estos sectores producen sistemáticamente, que un segmento de la sociedad avale dichos y hechos que estigmatizan y condenan a millones de personas que habitan nuestra Nación, es alarmante, pero más preocupante es que sean indiferentes y despectivos hacia quienes, el día de mañana, pueden ser ellos mismos. Nadie está exento de nada, mucho menos de caer en la trampa una vez más. Si no utilizamos la sensatez de pensamiento, el sentido común y el análisis racional, seguiremos condenados a los poderes que siempre nos provocaron zozobra, violencia, atropello, injusticia y más desigualdad. Se suma a todo esto, la reivindicación de dictaduras, torturadores y asesinos, más el anti patriotismo de querer otra moneda que no sea la nuestra y el cipayismo de despreciar las Malvinas Argentinas, admirando a una asesina inglesa como Margaret Tatcher. La ignorancia equivale a toda presunción de racionalidad; la ignorancia es uno de los temas más complejos de nuestros tiempos; la ignorancia pone de manifiesto no solo la ausencia de conocimientos, sino el hecho de rehusarse a alcanzarlos. Si se vota con ignorancia, se corre el riesgo de posicionar sujetos que no están preparados para tal responsabilidad (como ya nos ha ocurrido), y si a eso le sumamos rencor y resentimiento, se origina odio y si ese aborrecimiento es el eje del sufragio, nada bueno puede suceder.
martes, 7 de noviembre de 2023
NOSTALGIA
A veces siento nostalgia de una época pasada donde todo era más simple, más llano, más espontáneo, más natural; hablo de las relaciones, las convicciones, los propósitos, los designios y las concepciones. La vida nos da y nos quita. Por un lado, los avances tecnológicos, científicos, médicos y comunicacionales nos permiten una convivencia mucho más evolucionada y desarrollada; pero por el otro costado, ese mismo impulso y progreso, nos desdeña, nos desconecta, nos abstrae. Extraño el contacto más directo, la receptibilidad, la participación, la identificación propia y, también, la ajena, ¿por qué no? En estos complejos tiempos que corren, una palabra que se menciona mucho y se practica poco es “empatía”, acción que debería estar cada vez más presente, no solo en el discurso, sino, también, en la práctica, siendo, lamentablemente, otra contraposición de nuestra realidad que, en vez de intensificarse, se disgrega cada vez más. Deberíamos volver a muchas de las cosas que antes parecían insustanciales y hoy serían muy significativas. En fin… quizás es un trance algo absurdo volcar este sentimiento de esta forma, en el contexto que vivimos, pero me nació escribirlo y compartirlo. Aquí queda para quien pase y lo lea…
viernes, 3 de noviembre de 2023
SÓCRATES
Uno de los representantes fundamentales de la filosofía universal, el griego Sócrates, dijo con gran sapiencia y maestría: “Sólo hay un bien: El conocimiento. Sólo hay un mal: La ignorancia”. Es un pensamiento que toma relevancia en estos momentos que vivimos y una verdad que hay que tener en cuenta a la hora de decidir.
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